Disfruta del mar y la tranquilidad de Mallorca
A tan solo 200 metros de la preciosa playa Cala Molins se encuentra nuestro hotel boutique Oriola. Un hotel familiar, de 23 habitaciones, donde disfrutarás de una estancia y una gastronomía al estilo mediterráneo. Relájate en las terrazas con vistas al mar, refréscate en la piscina o disfruta de un cocktail en el chill out del hotel.
Cala San Vicente
Un destino vacacional de ensueño
En un entorno pintoresco de la zona noroeste de Mallorca, rodeado por las impresionantes montañas de Sierra Tramontana, se encuentra el pueblo de Cala San Vicente, que cuenta con cuatro preciosas playas. Este destino es perfecto para aquellos que buscan relajarse y descansar en una localidad tranquila que ofrece todas las ventajas de un gran centro turístico, ya que se encuentra a solo 15 minutos en autobús de Pollensa o Puerto de Pollensa.
Nuestras habitaciones
Nuestro encantador Boutique Hotel Oriola dispone de 23 habitaciones, cuidadosamente diseñadas y decoradas para garantizar una estancia inolvidable. Podrás relajarte y disfrutar de la tranquilidad en una terraza o un balcón con impresionantes.
Instalaciones
En nuestro hotel pueden disfrutar de una amplia gama de instalaciones que garantizan una estancia inolvidable a nuestros huéspedes. Disfruta de la tranquilidad en la piscina al aire libre, saborea el delicioso desayuno en nuestro restaurante o relájate en nuestras acogedoras terrazas. Permítenos hacer de tu estancia una experiencia inolvidable.
Hall Recepción
El corazón de nuestro hotel. Con un ambiente cálido y acogedor, nuestros amables recepcionistas te darán la bienvenida y te brindarán toda la información necesaria para una estancia perfecta.
Piscina
¿Hay algo más refrescante después de un caluroso día en el mediterráneo que un baño? Disfruta de nuestra piscina, relájate en nuestras hamacas y toma un refresco.
Alrededores
La magia de la zona norte de Mallorca es innegable: impresionantes vistas, playas paradisíacas, la amabilidad y la hospitalidad de los mallorquines, y el ritmo tranquilo de los pueblos mediterráneos. Sin embargo, para experimentar la verdadera belleza de la isla, tienes que vivirla. Ven a visitar Cala San Vicente y compruébalo por ti mismo.